Sube la actividad emprendedora en BCN
La tasa de actividad emprendedora (TAE) en Catalunya continúa creciendo. Según el último estudio Global Entrepreneurship Monitor (GEM), el porcentaje de población adulta involucrada en actividades emprendedoras en fase inicial alcanzó el 8,63% en el área de Barcelona en el 2018, el porcentaje más alto de los últimos 12 años. El porcentaje en Catalunya es del 8,13% y en España es del 6,39%. El estudio, realizado en 49 países con una metodología homogénea, confirma el auge del emprendimiento y el atractivo de Barcelona para su desarrollo en un marco alejado de la crisis económica. El índice mide el porcentaje de la población involucrado en la creación de nuevas empresas y se basa en encuestas representativas, que se han repetido en los últimos años.
El profesor de la Universitat Autònoma de Barcelona (UAB) Carlos Guallarte, director del estudio, resaltó este martes que el 24% de los emprendedores se han decantado por empresas vinculadas con el sector industrial y que tienden a reducirse las dirigidas al consumo, en una muestra de cambio en el tejido empresarial catalán: «Sería conveniente, aunque difícil de conseguir, que entre el 20% y el 25% de la economía catalana fuese del sector industrial y las políticas económicas deberían dedicar esfuerzos a ese objetivo». Las empresas de vocación industrial tienden a requerir personal de mayor cualificación profesional y salarios más altos. De los datos del estudio se infiere que al menos 300.000 personas se encuentran en estos momentos involucrados en impulsar un proyecto empresarial de nueva creación.
El inicio de actividades empresariales se da más por oportunidad que por necesidad
Sobre la motivación de los emprendedores para involucrarse en la creación de una empresa, los resultados del estudio apuntan que la motivación principal actual es más por oportunidad de negocio que por no encontrar empleo, algo habitual en periodos de crisis económica. Sin embargo, los datos confirman que el año pasado se produjo una caída en la percepción de oportunidades de negocio, que Guallarte atribuye de manera intuitiva a la situación de inestabilidad política, tanto en Catalunya como en España, que restó optimismo emprendedor.
Los emprendedores tienen una edad media de 38 años en el caso de empresas en fase potencial, 41 años en fase inicial y 49 en fase consolidada. La igualdad entre sexos entre emprendedores casi es una realidad en Catalunya. La TEA masculina es del 8,6% y la femenina del 7,7%. La tasa de supervivencia de las nuevas empresas, aquellas que superan los tres años, se ha situado en el 59,8%.
En opinión del secretario de la Conselleria de Empresa i Coneixement, Joaquim Ferrer, las conclusiones del estudio invitan al optimismo y a pensar que «vamos bien» en la promoción empresarial en el entorno de Barcelona. La diputada de Promoción Económica de la Diputació de Barcelona, Sònia Recasens, los datos de la tasa de actividad emprendedora «consolidan una tendencia» y son un «indicador de recuperación económica», sin olvidar que «también las mujeres están emprendiendo».